El 20 de junio de 2025, la Comunidad de Madrid, liderada por Isabel Díaz Ayuso (PP), anunció un contrato de 220.630 euros para adquirir 3.850.000 preservativos masculinos, 20.000 preservativos femeninos y 700.000 monodosis de lubricantes de cara a la semana del Orgullo LGTBIQ+, que se celebrará del 27 de junio al 6 de julio. Gestionado por la Consejería de Sanidad, el contrato busca reforzar la prevención del VIH y otras infecciones de transmisión sexual (ITS) durante un periodo de alta actividad social y sexual. Sin embargo, la decisión ha desatado críticas de VOX y Abogados Cristianos, que la consideran un “despilfarro” y una promoción de la “agenda LGTBI”. En un contexto donde el 23% de los hogares españoles no tienen ahorros, el gasto público en este programa ha reavivado el debate sobre las prioridades de la administración madrileña y su alineación con los valores conservadores del PP.
es lo mismo gastar en putas que en preservativos. El dinero publico no esta para satisfacer lo personal.
Un Contrato para la Prevención Sanitaria
El contrato, identificado como 25LT/2025 (A/SUM-018755/2025), se licitó mediante procedimiento abierto con un presupuesto base de 220.630 euros (234.560,30 euros con impuestos) y una duración de 120 días desde su adjudicación. Dividido en tres lotes —preservativos masculinos, femeninos y lubricantes—, el suministro incluye más de 4,5 millones de unidades bajo los códigos CPV 33712000-4 (preservativos) y 24951100-6 (lubricantes). La Consejería de Sanidad justificó la medida como parte de una campaña de salud pública para reducir riesgos durante el Orgullo, un evento que atrae a millones de visitantes a Madrid. En 2024, el gasto fue ligeramente inferior, con 220.480 euros para 3.950.000 preservativos masculinos, 15.000 femeninos y 700.000 lubricantes, lo que refleja un aumento de 150 euros y una redistribución en las cantidades adquiridas.
La iniciativa se enmarca en la campaña “Siempre Precaución”, que promueve prácticas sexuales seguras entre jóvenes, un grupo con tasas crecientes de ITS. Según el Instituto de Salud Carlos III, los casos de gonorrea en España aumentaron un 26% anual entre 2013 y 2017, y en 2024 se reportaron 150.000 personas con VIH, con un 7,5% de casos no diagnosticados entre 2021 y 2022. La Comunidad de Madrid, que espera más de 2 millones de asistentes al Orgullo 2025, considera el reparto de preservativos una medida clave para prevenir un repunte de infecciones durante las festividades.
🇪🇸 | Ayuso gasta más de 220.000 euros de todos los madrileños en comprar casi cuatro millones de preservativos y 700.000 lubricantes para el 'día del orgullo'. pic.twitter.com/8Dkgcg32jH
— ʜᴇʀQʟᴇs (@herqles_es) June 20, 2025
Críticas y Reacciones Políticas
La decisión ha generado una fuerte controversia. VOX, a través de su cuenta en la Asamblea de Madrid, calificó el gasto de “superfluo” y acusó a Ayuso de “despilfarrar” dinero público en “chiringuitos ideológicos” mientras los madrileños enfrentan dificultades económicas. Ana Cuartero, diputada de VOX, ironizó sobre el gasto en preservativos con sabor a fresa, sugiriendo que el PP prioriza “la fruta” sobre las necesidades reales. Abogados Cristianos presentó un recurso ante el Tribunal Administrativo de Contratación Pública, argumentando que el lote de lubricantes es “innecesario” porque los preservativos ya están lubricados según las especificaciones técnicas. La asociación, liderada por Polonia Castellanos, pidió la nulidad del contrato, comparándolo con “indecencias” como los gastos del PSOE en fiestas, y cuestionó su alineación con las obligaciones sanitarias de la administración.

El PP, por su parte, defendió la medida como una acción de salud pública alineada con su compromiso de prevenir enfermedades. La Consejería de Sanidad destacó que el contrato no usa fondos europeos y se ajusta a pliegos técnicos que priorizan la seguridad. Sin embargo, la oposición de izquierda, como Más Madrid y el PSOE, ha evitado pronunciarse directamente, posiblemente para no alienar a los votantes LGTBIQ+, aunque algunos líderes han criticado al PP por otras campañas del Orgullo, como el cartel de 2024 con preservativos y tacones, tachado de “estereotipado” por COGAM y la ministra de Igualdad, Ana Redondo.
El gasto superfluo del PP no tiene límites: 2,5 millones de € para colectivos LGTBI en un año y 220.000 € para comprar preservativos y lubricantes con sabor a fruta.
— Grupo Parlamentario VOX en Madrid (@vox_asambleamad) June 16, 2025
A Ayuso le gusta mucho la fruta, pero a VOX no le gusta nada que se despilfarre el dinero de los madrileños. pic.twitter.com/FKAdg9UZ6x
Un Debate sobre Prioridades y Valores
El contrato reabre el debate sobre el uso de fondos públicos en eventos como el Orgullo, que combina celebración y reivindicación. Madrid, con un turismo que aporta el 12% de su PIB, se beneficia del Orgullo, que generó 197 millones de euros en 2024 según la Cámara de Comercio. Sin embargo, el gasto de 220.630 euros ha sido cuestionado en un contexto de crisis económica, con un 28% de niños en riesgo de pobreza y una deuda pública del 103,5% del PIB. Críticos como VOX y Abogados Cristianos argumentan que los recursos deberían destinarse a necesidades más urgentes, como la sanidad o el apoyo a familias vulnerables.
La polémica también refleja tensiones ideológicas dentro del PP. Ayuso, conocida por su discurso conservador, ha mantenido políticas inclusivas como el mantenimiento de banderas LGTBIQ+ en edificios públicos, lo que ha generado fricciones con VOX, su aliado ocasional. La contratación de figuras controvertidas, como la youtuber “Soy una Pringada” para Veranos de la Villa, y ahora este contrato, sugieren un intento de equilibrar valores conservadores con la atracción de un electorado diverso. Sin embargo, estas decisiones han avivado acusaciones de incoherencia, con VOX denunciando que el PP cede a la “agenda globalista”.
El precedente de 2019, cuando el Ministerio de Sanidad donó 60.000 kits de preservativos para el Orgullo bajo el mandato de María Luisa Carcedo (PSOE), muestra que estas iniciativas no son exclusivas del PP. Sin embargo, el aumento progresivo del gasto —de 3.050.000 preservativos en 2019 a 4.570.000 unidades en 2025—ha intensificado las críticas. Abogados Cristianos argumenta que los lubricantes monodosis no tienen justificación médica, mientras VOX cuestiona el uso de impuestos en un evento que consideran ideológico.
🤬 Casi 700.000 € del Gobierno de Ayuso para preservativos y lubricantes en el Orgullo y para el chiringuito LGTBI.
— Grupo Parlamentario VOX en Madrid (@vox_asambleamad) June 19, 2025
💸 Mientras miles de madrileños no llegan a final de mes, Ayuso despilfarra el dinero público en chiringuitos ideológicos.
🚫 Ni un euro más para chiringuitos… pic.twitter.com/XFhw54WsrH
Un Orgullo bajo Escrutinio
El Orgullo de Madrid, uno de los mayores del mundo, es un motor económico y cultural, pero también un foco de controversia. La inversión en preservativos y lubricantes, aunque justificada como salud pública, ha reavivado el debate sobre las prioridades del gasto público. El PP debe navegar entre su base conservadora y la necesidad de mantener a Madrid como referente inclusivo. Mientras VOX y Abogados Cristianos exigen la anulación del contrato, la sociedad madrileña, afectada por la precariedad, espera que las políticas públicas equilibren la prevención sanitaria con las necesidades sociales. El Orgullo 2025, con su lema de inclusión, se celebrará bajo la sombra de un debate que trasciende la fiesta y cuestiona los valores de la administración de Ayuso.
Ayuso invierte 220.000 euros en el Orgullo: ¿salud pública o despilfarro ideológico? 🌈