El Gobierno español ha puesto en marcha este miércoles las primeras medidas de un ambicioso plan de respuesta frente a los aranceles impuestos por Estados Unidos, con una inyección inicial de 7.720 millones de euros. Esta cifra forma parte de un paquete total de 14.100 millones aprobado el martes en el Consejo de Ministros mediante un real decreto-ley de medidas urgentes, publicado en el BOE, para contrarrestar los efectos de la guerra comercial desatada por la Administración de Donald Trump. El objetivo es claro: mitigar el impacto de los gravámenes del 20% que afectan a Europa desde este mismo día y blindar la economía española ante un escenario de incertidumbre global.
El plan se activa con varias líneas de acción. La más destacada es una partida de 5.000 millones en avales del Instituto de Crédito Oficial (ICO) destinada a garantizar la liquidez de empresas exportadoras e importadoras golpeadas por las nuevas tarifas. A esto se suman 2.000 millones gestionados por la Compañía Española de Seguros de Crédito a la Exportación (CESCE) a través del sistema CARI, un mecanismo que actúa como un seguro para estabilizar tipos de interés y apoyar las exportaciones de bienes y servicios. Además, se amplía el Fondo para la Internacionalización de la Empresa (FIEM) con 720 millones adicionales, enfocados en impulsar la presencia de las compañías españolas en mercados alternativos.


El ministro de Economía, Carlos Cuerpo, calificó los aranceles de “injustificados y arbitrarios” durante la rueda de prensa tras el Consejo de Ministros, subrayando que el mundo enfrenta el mayor “shock comercial” en un siglo. El decreto también incluye una extensión de la moratoria contable hasta finales de 2025 para empresas con pérdidas en 2020 y 2021, una medida pensada para dar oxígeno a sectores aún en recuperación. Otros puntos destacados son un fondo de 200 millones para inversión industrial —con préstamos o participaciones en capital para modernizar plantas productivas— y la activación del mecanismo RED, similar a los ERTE de la pandemia, para proteger empleos en las industrias más afectadas.
Datos adicionales de El País (abril 2025) indican que el plan busca no solo amortiguar el golpe, sino también reorientar la producción hacia sectores como la defensa y la energía, aprovechando la crisis como una oportunidad de reconversión. La estrategia incluye un compromiso de “equilibrio territorial”, asegurando que las ayudas se distribuyan proporcionalmente entre regiones, un guiño a demandas de partidos como Junts, que reclama un 25% de los fondos para Cataluña. Sin embargo, el PP ha tildado las medidas de “insuficientes”, exigiendo más foco en competitividad y fiscalidad.
Con las bolsas aun tambaleándose —el Ibex 35 cayó un 5,5% esta semana, según datos previos— y el comercio global en jaque, el Gobierno apuesta por una respuesta rápida y dialogada.
¡Sánchez saca el paraguas económico, pero veremos si aguanta la tormenta de Trump! ☔💸 #GuerraComercialAranceles – No es magia, son tus impuestos. Y sin presupuestos aprobados ¡No Digo más!